En Uruguay este 4 de agosto se lleva a cabo un pre referéndum para derogar la Ley Integral para las Personas Trans, la cual facilita el cambio de sexo registral, garantiza el acceso a la hormonización e intervenciones quirúrgicas y asigna una cuota para empleos, del 1%, en el gobierno y becas educativas.
Este pre referéndum fue promovido por grupos conservadores evangélicos quienes consiguieron reunir las 70 mil firmas necesarias para su efecto, debido a que consideran que la «ley discrimina» a otros sectores de la población en favor de las personas trans.
La Ley Trans, como se le conoce popularmente, fue aprobada el 19 de octubre del año pasado y atiende distintas necesidades de este grupo poblacional detectadas en el censo realizado en 2016 por el Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), el cual arrojó que…
- El tramo de edad donde hay mayor concentración de personas trans es el de 18 a 29 años.
- El 58% declaró haber sufrido discriminación por algún miembro de su familia.
- El abandono del hogar a los 18 años, a causa del cambio de identidad de género, representa 25% y trae consigo abandono de estudios lo que a su vez incide en el trabajo sexual como alternativa económica.
- El 32,5% de las personas trans realizaron trabajo sexual, mientras que 67% acepta haberlo ejercido en algún momento de su vida.
- A nivel educativo, reportan que han sufrido discriminación de parte de profesores; 19% en la educación básica y en Secundaria supera el 20%.
Para tener efecto este pre referéndum necesita contar con la participación de al menos 25% de la población, ya que no es una votación obligatoria, lo que ha movilizado a activistas de los derechos humanos, académicos, el sector salud uruguayo, organismos internacionales como la ONU y Amnistía Internacional, y partidos políticos en una campaña que pide a la población no salir a votar.