La defensora de los derechos humanos y la comunidad lgbt+, Jazz Hernández expone:
La mañana es fresca y los rayos del sol comienzan a salir, frente a mí pasa un par de ancianos vendiendo fruta y flores, comienzo a bajar un par de calles hacia el punto de encuentro y a los pocos pasos veo venir a Carmen.
Nos saludamos con una sonrisa ambas, ella muestra timidez en su mirada mientras voltea hacia el frente de la calle.
Cuando me contactó por primera vez me dijo que se llamaba…, al tener mayor confianza me compartió el nombre de Carmen con el cual se autopercibe y que lamentablemente después del atroz ataque tuvo que deconstruirse, guardando en el clóset a Carmen.
La siguiente historia donde Carmen una mujer Trans trabajadora sexual quien radica en Xalapa, Veracruz, fue apuñalada, golpeada y abusada sexualmente en 2019 por dos sujetos, después de tener todas las pruebas contra sus atacantes y levantar denuncia sus 2 atacantes salieron libres a los pocos días.
Casi un año después es atacada nuevamente por los mismos 2 hombres pero en esa segunda ocasión iba acompañada de su hermana Karen, ambas mujeres trans fueron golpeadas.
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LA ENTREVISTA
La madrugada del 2 de mayo del 2019 sería un día que Carmen jamás olvidaría, como cada noche acudía a su lugar de trabajo en la avenida Lázaro Cárdenas en la zona de tolerancia en la capital Xalapeña. Aproximadamente a la media noche se acercó un taxi a ella y le pidió un servicio, ella abordó sin percatarse que en los asientos de atrás estaba otro hombre.
Esa noche no había sido la mejor así que tomó la decisión de no bajarse, los tipos la llevaron a una colonia hacia el oriente de la ciudad y en un baldío comenzaron abusar sexualmente de ella, al terminar ambos de violarla, Nicolás dijo: «hay que matarlo», así ambos comenzaron a golpearla, ella gritaba auxilio mientras Nicolás la apuñalaba en la cabeza, brazos y la espalda, a la par José, el más joven de aproximadamente 20 años le daba múltiples golpes a puño cerrado y patadas.
Carmen estuvo hospitalizada un par de semanas donde se debatió entre la vida y la muerte.
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Los médico legistas que le atendieron en el área de urgencias del hospital de alta especialidad de Xalapa nunca giraron a fiscalía el documento de diagnóstico donde anotaron el abuso sexual y múltiples puñaladas y golpes con que llegó Carmen al área de urgencias, desde principio su procedimiento jurídico fue turbio y con omisiones institucionales.
Al llegar a la Fiscalía especializada le tomaron su declaración y crearon el Número de expediente 113/2019-UIPJ/DXl/F3/2640/2019 sin embargo la Juez de control Mónica Segovia Jacome dictaminó una medida cautelar de 5,000 cinco mil pesos a Nícolas y José para salir libres, José el menor de los atacantes salió al otro día y Nicolás estuvo aproximadamente 20 días en la cárcel.
Carmen estaba furiosa y con mucho miedo ya que dejaban libres a sus dos atacantes quienes la enviaron al hospital por semanas donde casi pierde la vida. El fiscal tercero Felipe Baizabal y vigésimo cuarto Karen Hapu le recomendaron a la agraviada que aceptara la cantidad de Cinco mil pesos ya que de todas maneras
«sus agresores saldrían libres».
Sin más que hacer se fue a su casa con su familia, intentó seguir su vida trabajando parcialmente en otros empleos y los fines de semana acudia al trabajo sexual, ahora con mayores precauciones.
El tiempo transcurrió y el miedo invadió a Carmen, pensar que sus dos agresores estaban vivos en el mismo municipio donde ella vivía y podían encontrarla en cualquier ocasión le causó depresión. También eso la llevó a tomar una muy difícil decisión a deconstruirse como mujer para esconder su identidad y poder pasar desapercibida.
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Carmen se cortó el cabello, dejó de maquillarse, y guardó los vestidos y faldas en el closet para ahora usar pantalones holgados, chamarras y gorras.
Un día a principios del mes de abril del 2020 Carmen nos comparte que estaba laborando como guardia de seguridad en una colonia popular de Xalapa acompañada de su hermana Karen quien también es una mujer trans, para sorpresa de ella se toparon de frente con José el menor de sus atacantes en 2019, el joven salió corriendo hacia una casa y acto seguido salió Nicolás quien le gritó a Carmen: «Pinche puto si la otra vez no te maté, ahora y te voy a matar», comenzaron a querer golpearla y Karen se metió a defenderla, Karen le gritaba «Corre a pedir ayuda», desesperadamente buscaba el botón de seguridad de la red vecinal y lo apretó, los vecinos del lugar solo veían el pleito pero nadie se metió a defender a Karen quien logro zafarse y correr para seguir a Carmen.
A las salida de la calle de dicha colonia ambas hermanas ven a la policía llegar y ellas le comentaron lo ocurrido, los policías declararon que en esa colonia las personas eran muy problemáticas y que anteriormente le habían aventado piedras a sus unidades, que lo mejor seria ellos les escoltaron hasta su casa.
En el segundo ataque ambas hermanas acudieron ante la fiscalía en la capital xalapeña, abriendo la carpeta de investigación UIPJ/DX/F6/1749/2020 No. 1029/2020
El crimen de abuso sexual en mayo 2019 y el intento de feminicidio en dos ocasiones a Carmen y una ocasión a su hermana Karen, lamentablemente continuan en impunidad.
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El estado de Veracruz desde el año 2012 a la fecha ha estado ocupando los primeros lugares a nivel nacional en crímenes de odio cometidos hacia las personas LGBTI+ en el último año la plataforma del observatorio nacional de crímenes de odio colocó al estado con el primer lugar
El estigma e irregularidades con el que ha sido tratado el caso de Carmen por el hecho de ser una mujer transgénero y trabajadora sexual nos deja claro el desafío que aun se tiene dentro de las instituciones publicas a la hora de aplicar la
perspectiva de género, la mala practica de los jueces de control al dejar libres a cientos de asesinos en potencia por el hecho de que los peritajes emitidos por integrantes de la fiscalía, no son bien fundamentados, con ello dejando sin
elementos probatorios para presentar ante los jueces de control.
Es muy importante las personas LGBTI+ extremar precauciones ya que nadie estamos exentos de que le pueda ocurrir algún ataque.
**Las opiniones aquí expuestas representan a la autora de la columna.