Secretaría de Cultura reconoce la primera visibilización pública lgbt+ de 1978

Juan Jacobo Hernández, activista histórico del movimiento lgbt+, y fundador del Frente Homosexual de Acción Revolucionaria (FHAR), describió como alentador el reconocimiento institucional que recibe la primera visibilización pública del movimiento de liberación homosexual, más tarde movimiento lgbt+, de México en 1978.

Con el conversatorio, El Arcoiris se hizo Luz, organizada por el Instituto Nacional de Estudios Históricos de las Revoluciones de México (INEHRM), de la Secretaría de Cultura, se conmemoró la presencia de los primeros activistas lgbt+ en la marcha del 25 aniversario de la revolución cubana, en el Ciudad de México, como la primer manifestación pública y política de un colectivo lgbt+ en México, que marcó un antes y después en la visibilización de la diversidad sexual mexicana.

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Jacobo Hernández expuso cómo el movimiento lgbt+ llegó al punto de la manifestación pública a partir de la autoconstrucción, desde un hartazgo por las condiciones homofóbicas de la sociedad mexicana del siglo pasado, e inspirándose en los movimientos feminista, afroamericano y hippie, movimientos que lograron cuestionar el cuerpo, la raza y la imagen machista de los géneros.

«Con esas referencias fuimos tratando de entender, colectivamente, quiénes éramos, y por qué siendo como éramos se nos maltrataba, se nos consideraba como enfermos, criminales, pecadores», declaró Hernández.

Además se enfrentaban a la censura por parte del Estado de la palabra homosexual en los medios de comunicación e imprentas y la propia homofobia latente dentro de los movimientos políticos de izquierda, como en el Partido Comunista mexicano.

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Ante estas condiciones, los textos e información internacional que eran compartidas por Carlos Monsiváis desde el extranjero para los miembros del FHAR fueron fundamentales para construirse como identidades de la diversidad sexual., en un proceso que tomó años.

«Comenzamos a tener las sesiones de concientización, de empezar a conocernos a nosotros mismos, quiénes éramos, por qué nos daba tanta pena, tanto dolor el tener que estar aceptándonos como homosexuales».

Juan Jacobo Hernández

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Para el activista histórico el hecho de comenzar a participar en las manifestaciones sociales, también en la marcha del décimo aniversario de la Matanza de Tlatelolco, y protestas contra las detenciones arbitrarias, abrió la puerta a que personas lgbt que habían sufrido los abusos sociales y políticos de la homofobia se unieran en la lucha contra a favor del reconocimiento de sus derechos.

«Empiezan a llegar la gente de a pie, ‘las loquitas, las vestidas, los chavos que no tenían, los que tenían’, y llegaban con una cara de entusiasmo, con una enjundia que a nosotros nos inflamó. Ahí fueron donde se juntaron los pequeños burgueses que eramos nosotros con aquellos a los que sí les estaba llegando de una manera fuerte el mensaje y que no tenían nada que perder» , recalcó.

Asimismo las consignas ayudaron a que el empoderamiento dentro de las identidades lgbt se fuera cimentando, como la frase «Soy homosexual ¿y qué?», con el que se fue abriendo camino enunciar demandas como el trato igualitario, exigir el cese de la represión, y reeducar a los medios de comunicación.

Te dejamos el link de la charla por si quieres saber más del Movimiento LGBT mexicano:

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