El Congreso del Estado de Jalisco aprobó solo multar las terapias de conversión o esfuerzos para corregir la orientación sexual e identidad de género de las personas lgbt+.
La prohibición se votó (en secreto) a favor por 32 legisladores, 5 en contra y 0 abstenciones en la sesión del 6 de abril del 2022, la cual se extendió hasta la madrugada.
Te puede interesar: Reino Unido prohibiría las terapias de conversión excepto para las personas trans
Te puede interesar: ONU: Terapias de conversión, perpetúan la tortura
Durante la discusión de discusión sobre las terapias de conversión en Jalisco, los y las diputadas votaron por una modificación a la ley la cual ya no aplicará medidas penales (cárcel), únicamente una sanción económica de 50 a 300 veces el valor de la Unidad de Medida y actualización.
Cuando estos actos de tortura sean realizados en menores de edad o personas en situaciones vulnerables, las multa aumentará.
NO se les inhabilitará de su ejercicio profesional a quienes ofrezcan estas prácticas disfrazadas de procesos «psiquiátrico y/o psicológicos».
Te puede interesar: Localizan con vida a Verónica Fonseca #TeBuscamosVero
Te puede interesar: Pensamientos suicidas se concentran en jóvenes lgbt+
Jalisco se convirtió así en el estado número 8 en sancionar las terapias de conversión en México. El único estado en solo aplicar multas económicas.
Desde 2020 en la CDMX dichos procedimientos están prohibidos hasta con penas de uno a tres años de cárcel. El Estado de México fue el segundo en castigar dichas prácticas.
En 2021 se sumaron el Tlaxcala, Colima, Zacatecas, Yucatán y Baja California Sur.
Desde 2018 en el Senado de la República se presentó una iniciativa para prohibir las terapias de conversión en todo México. A cuatro años la iniciativa no ha sido votada ni en Comisiones.
¿Por qué fue una votación secreta?
Con 25 votos a favor de una votación por cédula, es decir en secreto, fue pedida por la diputada Susana de la Rosa, quien argumentó que ella y diversos diputadas fueron agredidas por desconocidos, por lo cual temían por su seguridad.
Petición que preocupó a activistas y aliades de la comunidad lgbt+ ya que la votación secreta es parte de la malas prácticas que tienen los legisladores mexicanos para tratar temas «polémicos»