Chile culpable por discriminar a maestra lesbiana Sandra Pavez

El estado de Chile es responsable de discriminar a la maestra lesbiana Sandra Pavez por su orientación sexual, sentenció la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

La maestra Pavez fue separada de su cargo como profesora de religión católica del Colegio “Cardenal Antonio Samoré” a cargo de la Vicaria para la Educación del Obispo de San Bernardo.

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Pavez vs el Estado de Chile

El estado de Chile fue demandado por la maestra lesbiana Sandra Pavez por actos de discriminación en su contra a razón de ser una mujer lesbiana.

La demanda fue interpuesta ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos, luego de ser considerado que el hecho se dio en razón de discriminación por orientación sexual y representa el primero en su tipo que atañe al ámbito educativo.

La primer audiencia publica se llevó acabo el pasado 12 de mayo. Se expuso que en 2007 le fue quitado su certificado para impartir clases de religión por parte de la Secretaria para el Obispado de San Bernardo, una institución de educación pública.

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A pesar de buscar justicia ante las instancias judiciales de Chile, Pavez sólo recibió negativas ya que la decisión de cesarle de su profesión se encuentra amparada por el Decreto 924 del Ministerio de Educación que faculta a las iglesias a decidir quiénes pueden impartir clases.

«El Estado de Chile es responsable por violación a la vida privada y autonomía, al principio de igualdad y no discriminación, al acceso a la función pública en condiciones de igualdad, al trabajo, a contar con decisiones motivadas y a la protección judicial”

concluyó la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para llevar este juicio ante la Corte Interamericana.

La Comisión recalcó que Pavez fue exhortada por las autoridades educativas a «cesar su vida homosexual, tomar terapias psicológicas para que pudiera seguir con sus funciones como profesora».

En la sesión Pavez señaló que las autoridades sabían de su orientación sexual por los cerca de 22 años que ejerció como maestra de religión. Mantenía su vida privada y profesional separadas.

«Me atendió el padre, Rene Anguilera, quien era vicario en ese entonces, encargado de los profesores de religión, me preguntó ‘¿Es verdad lo que dicen? ¿Tú eres lesbiana?’, yo le dije ‘Sí, yo soy lesbiana’; y de ahí él me dijo ‘esto no puede ser, tú eres profesora de religión, eso no le va a gustar al obispo'».

narró Sandra Pavez

Sus condiciones para no despedirla era negar su identidad y dejar a su pareja, ante lo que Sandra Pavez respondió que no, y que merecía respeto y dignidad como cualquier persona.

Ante la negativa, el Obispo en turno le expresó que «las penas del infierno iban a caer sobre ella», que «tenia el demonio dentro» y que necesitaba tomar tratamiento psicológico y psiquiátrico para poder curarse de «esa enfermedad».

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La resolución a favor de la maestra Pavez

La Corte Interamericana de Derechos Humanos determinó medidas de reparación a favor de la maestra lesbiana Pavez. Entre ellas el Estado de Chile tiene la obligación de ofrecer un acto público donde acepte la responsabilidad del caso.

La profesora recibirá una compensación económica para los gastos de tratamientos psicológicos y/o psiquiátricos necesarios, y en reparación de daños materiales e inmateriales. Así como el reintegro de gatos que halla implicado el proceso judicial.

También el Estado de Chile deberá crear las politicas publicas necesaria de capacitación y nombramiento de personal docente.

«La Corte Interamericana reconoció que las autoridades religiosas chilenas cuentan con una autonomía amplia a la hora de otorgar un certificado de idoneidad para dictar clases de religión. Sin embargo, indicó que, por ser una asignatura que forma parte de los planes de educación de niñas y niños, esas facultades que derivan directamente del derecho a la libertad religiosa, deben adecuarse a los otros derechos y obligaciones vigentes en materia de igualdad y no discriminación», desarrolló la CIDH.